Como
si se tratase de un argumento sacado de un cuento de Ray Bradbury o
un fenómeno paranormal, una nube de polvo se apoderó de un paraje
ubicado a 200 km al noreste de la capital de
Santiago del Estero (Argentina). Desde hace casi un mes, un
remolino emerge de la tierra y altera la tranquilidad a la que están
habituadas las siete familias que pueblan el poblado Puna.
“Ocurre
a partir de las tres de la tarde, desde hace 23 días, en un terreno
arado que pertenece a un agropecuario que explota las tierras pero no
vive allí”, explicó Angel Ponti, titular de la agencia de
Desarrollo, dependiente del ministerio de la Producción, de Santiago
del Estero. Para el funcionario lo anormal no es el remolino en sí,
“lo extraño es que se produce todos
los días, en el mismo lugar y a la misma hora, con una duración de
cinco horas”.
Si
bien el titular de la agencia de Desarrollo prefiere alejarse de
teorías paranormales para encontrar una explicación, tanto Ponti
como el ministro de Producción, Juan de Dios Enrique, utilizaron la
palabra “miedo”
para calificar el sentimiento de las familias del paraje.
“Se
viven momentos de preocupación y angustia. Es difícil sufrir todas
las tardes este hecho. Algunos vecinos no pueden respirar y, en
ciertas ocasiones, el polvo oscurece el cielo, como si estuviese por
llover”, afirmó Ponti. Para encontrar explicaciones, en lo que en
principio no puede definirse, desde el ministerio de Producción
adelantaron la puesta en marcha de una “investigación
técnica para
saber qué es lo que sucede”.
Desde
el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), son más
cautos. “Al hablar con especialistas en meteorología nos
explicaron que es un fenómeno natural que tiene lugar cuando una
superficie sin cobertura alcanza una temperatura muy alta”, detalló
Miguel Perotti, miembro del área experimental del INTA en Santiago
del Estero. Según explicó, el remolino es una elevación de aire
cálido, en busca de áreas de menor temperatura.
Fuente: Clarín
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